Carlos Mazón
Mazón se aferra al sillón siete meses después de la dana acorralado por las encuestas y la presión del PP

Doscientos once días después de la dana que dejó 228 muertos, 300.000 personas damnificadas y 75 municipios afectados en la provincia de Valencia, la gestión —o, más bien, la ausencia de de ella— del presidente Carlos Mazón durante las horas más críticas de la tragedia le sigue pesando como una losa. Hasta entonces, el conservador gozaba de popularidad en las encuestas y se mostraba como un político cercano en redes, con una estrategia comunicativa muy ligada a la calle. Sus colaboradores más cercanos estaban convencidos de que el tirón del jefe del Consell iría a más y de que aguantaría varias legislaturas.
Una convicción que ya nadie mantiene, ni dentro ni fuera del Partido Popular. Las mentiras, los cambios de versión y la falta de previsión de Mazón durante el 29 de octubre de 2024 dejaron sentenciado su futuro político. Así se desprende de la demoledora encuesta publicada este miércoles por el diario valenciano El Levante, que apunta a que el 81,2% de los encuestados —con una muestra de 750 entrevistas—cree que el jefe del Consell debería dimitir tras su actuación en la dana y el 90% considera que no debería presentarse a la reelección.
Esa percepción está también extendida entre los votantes del PP, y el president valenciano tiene difícil revertirla pese a sus incesantes intentos por sacudirse cualquier tipo de responsabilidad. Durante estos meses ha tratado de imponer una versión en la que él se presentaba como una "víctima" y un "daño colateral" del Gobierno de Pedro Sánchez. La versión, apoyada por sus consellers, pero también por el PP nacional y por Vox, ha buscado culpabilizar desde el primer momento al Ejecutivo central por la supuesta "falta de información".
Sin embargo, los contundentes autos de la jueza Nuria Ruiz Tobarra, titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Catarroja, no han dejado lugar a dudas sobre la responsabilidad y las negligencias del Consell de Mazón en lo ocurrido. Además de remarcar que la Generalitat siempre ostentó el "mando único de la emergencia", también ha destacado que la dana no fue un "fenómeno meteorológico imprevisto", que no se produjo el tantas veces aducido "apagón informativo" por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar y que el mensaje masivo a los móviles, que se envió a las 20.11 horas, fue "tardío y erróneo".
Ni los autos de la jueza, ni las multitudinarias manifestaciones, ni los abucheos en público, ni la presión de los familiares de las víctimas o la evidente incomodidad de sus compañeros de partido han llevado al también líder del PP valenciano a renunciar al cargo. Sí forzó rápidamente, sin embargo, las destituciones de las conselleras Nuria Montes (Industria) y Salomé Pradas (Emergencias), esta última imputada por la jueza Nuria Ruiz junto con el exsecretario autonómico de Emergencias, Emilio Argüeso. Él se mantuvo en la presidencia de la Generalitat y únicamente se comprometió a marcharse si no era capaz de "liderar la reconstrucción".
El PP de Feijóo quiere librarse "del lastre" de Mazón antes del congreso de julio
Así ha sobrevivido políticamente durante estos últimos siete meses. Las fuentes más optimistas —las de su entorno— creen que Mazón resistirá toda la legislatura, lo que le garantizaría un sueldo de 75.000 euros durante 15 años, dos asesores y un chófer a su disposición. El jefe del Consell podría acceder a esos beneficios gracias al estatuto de los expresidentes de la Generalitat, pero para ello debería aguantar los cuatro años de mandato o convocar un adelanto electoral. Ambas opciones, pero especialmente esta última, supondrían un mazazo para la estrategia del líder del PP nacional, Alberto Núñez Feijóo, cuyo principal objetivo es que su formación vuelva a gobernar en la Comunitat Valenciana. Y, según sus encuestas internas, actualmente no podrían lograrlo.
Otras fuentes apuntan a que podría dimitir tras el verano. Así se aseguraría ese mismo sueldo público, pero durante dos años —es decir, trece años menos que si acaba la legislatura o si adelanta elecciones, una prerrogativa exclusiva del jefe del Consell—, siempre y cuando resista en el cargo hasta el próximo 13 de julio, momento en el que se cumple la mitad de su mandato. Por lo pronto, la opción que crece con más fuerza y que ha disparado todo tipo de rumores, tanto en Madrid como en València, es la de que el president de la Generalitat realice un anuncio tras aprobar los presupuestos autonómicos (que han salido adelante tras debatirse y votarse este mismo miércoles en Les Corts) en el que se comprometa a no presentarse a la relección.
Este último sería, según admiten fuentes de la dirección nacional del PP a infoLibre, el "mejor escenario" para ellos. Así, Feijóo se libraría del "lastre" de Mazón y el presidente valenciano no acapararía las conversaciones en el próximo congreso del partido, previsto para la primera semana de julio, en el que Génova se está volcando. De esta forma también tendrían tiempo de buscar un candidato alternativo y el jefe del Consell podría mantenerse en el cargo o, al menos en su escaño, durante lo que queda de legislatura con los presupuestos de este año ya aprobados. Las fuentes consultadas evitan, sin embargo, adelantar decisiones, pero no ocultan su satisfacción ante la perspectiva de que "el problema Mazón" se acabe o, al menos, se diluya en los próximos meses.
Mazón, por su parte, no es ajeno a los rumores sobre su marcha o su renuncia a la relección. "Yo voy a continuar para cumplir mi compromiso, que no es otro que 24 horas al día estar pendiente de la reconstrucción, de la Comunitat Valenciana y del compromiso que hemos asumido", aseguró este miércoles tras participar en la apertura de un foro empresarial organizado por el Círculo de Directivos de Alicante. Y añadió: "Las reflexiones sobre mi persona son la última prioridad, lo dije desde el principio. Esto no va de Carlos Mazón, no va de cálculos políticos. En eso están los demás", mantuvo.
También se pronunció en esa línea el portavoz del PP en Les Corts, Juanfran Pérez Llorca, que precisamente está en las quinielas para ser la figura de transición, aceptada por Vox, en el caso de que Mazón renunciara. Pérez Llorca, sin embargo, trató de despejar los rumores y aseguró que la etapa del jefe del Consell seguirá tras la aprobación de las cuentas autonómicas. "Con la aprobación de los presupuestos hay un presidente que cumple con sus obligaciones", señaló también este miércoles. Preguntado por si Mazón acabará la legislatura al frente de la Generalitat, respondió: "Yo creo que sí".
Vox se erige como el salvador del presidente valenciano
Mazón aplica el 'manual PP' tras negarse a recibir a las víctimas de la dana: del Yak-42 a las residencias
Ver más
La aprobación de los presupuestos, cuyo debate y votación PP y Vox han condensado en un único día, deja a Mazón como el único presidente del PP en minoría que logra sacar las cuentas públicas de 2025. Para ello ha tenido que replicar el discurso xenófobo de la formación de Santiago Abascal al aceptar sus exigencias en materias como la migración o la lengua. Para demostrar su compromiso, el día en que anunció el acuerdo, cargó contra el pacto verde europeo, el "dogmatismo climático" y se negó a acoger a menores migrantes.
Lo cierto es que en estos casi dos años al frente de la Generalitat, la sintonía de Mazón con la extrema derecha ha sido total, hasta el punto de que fue el presidente autonómico que primero alcanzó un acuerdo con Vox tras las elecciones autonómicas de 2023. Un rápido movimiento que se interpretó en Génova como un error porque, a su juicio, contribuyó al dar alas a la campaña de Pedro Sánchez en las generales. Aunque la dirección nacional del Partido Popular dio libertad a sus barones autonómicos para pactar con los ultras, las cesiones a los de Abascal perjudicaron las expectativas de Feijóo, a juicio de Génova, en las generales de 2023.
Una alianza que se mantuvo tras la ruptura de los gobiernos autonómicos forzada por Abascal el pasado verano. Desde entonces, ambas formaciones han seguido votando de manera conjunta y coordinada en les Corts, hasta llegar a pactar las cuentas autonómicas que se han aprobado este miércoles. "Solamente Vox ha estado a la altura para que en el momento más decisivo la Comunitat tenga presupuestos", declaró Mazón, que sin el apoyo de los ultraderechistas tampoco hubiera podido mantenerse en el cargo estos los últimos meses.